domingo, 27 de diciembre de 2009

X


Presiento que no le debemos nada a nadie

más que el seguir existiendo

No le debes a la voz de tus padres en tu mente

o a las reglas insinceras y vetustas de la tirania imperante.


No le debes a los dioses

porque ellos diserañon los laberintos

y nos dejaron elegir uno de tantos...

uno de tonto, ahí va


Cuando te suspendes en la indecisión

contienes el aliento de la causa y efecto

congelas la inercia de los días demacrados


La indecisión es una rebelión

la más premeditada

la más cínica

todo es suspensión


Tú mismo eres un tercio de puntos suspensivos

puestos

en

la

boca

del caos

...

viernes, 25 de diciembre de 2009

IX

Alguien me dijo: "vos tenés cara de desgraciado”
"de que te hace falta algo"
eufemísticamente hablando...
y yo pensé…¿será?

si somos un animal mutilado
de nacimiento
corriendo en busca de refugio y no dueño
cruzando un río lleno de piedras resbalosas, filosas
que nunca se acaban

buscando a tientas, en la penumbra, alguna luz
que nos recuerde la ilusión primera
de ser uno con el dios sol y la diosa luna
con sus ciclos y siluetas ondulantes, penetrantes
afiladas como para asustar al más impávido
generosas, como para prodigar
al más desválido, harapiento, solitario,
el abrazo de la taciturna luz benigna.

Más me detuve en lo que reflejo mi anhelo
sin saber que era apenas el primer boceto
de la falange de un otro más grande
y no por ello más soberbio,
Más poderoso…
Y no por ello, más tirano
más santo, y no por ello alejado

Me rendí al sentirme por él rodeado
en todo, en todos,
en calma
y abracé mi propio cuerpo
Su templo
¡qué refrigerio!
Su
si
len
cio

VIII

Cuantas historias se dibujan o desdibujan
cuantas puertas desgastadas, calles pintadas
gestos que esconden mar de historias
en risas, rictus o seriedad compungida

Cavamos pozos, para luego caer en ellos
ya dentro, en la oscuridad tenebrosa
maldecimos a la suerte, dios o el diablo
qué culpa tienen!

ojos que acusan,
dedos que señalan
mutismo que lastima
indiferencia que mata
cada cual aparcado en su propia rutina
siempre menospreciando al de junto
más feo, más raro, más chato
más pobre, más rico, más alto…

Las flores y su obstinación por vivir
enseñan más al flaco humano
que mil libros de moralina
o recetas para vivir del vaticano


¡Cuánto tiempo perdemos en compadecernos de nuestra condición!
sintiéndonos en nuestras palabras como un gusano
No sabemos que él va tan campechano
con ese aire y gesto de muy ufano
por no conocer más mundo y natura
No anda con elucubraciones, divagando…
"la inmortalidad", "permanencia", "omnipotencia"
tantas figuraciones en la cabeza
no dejan respirar al hombre
que de constante se ve y siente atrapado

nuestra mayor virtud es nuestro más grande mal
porque al querer nuestra inteligencia mal usar
creamos cuentos de nunca acabar
como la historia del bien y el mal
la ineptitud y castidad

por qué mejor no aceptar nuestra condición
sin tanto brinco y emoción
para qué tanta preocupación ...
vayamos o vengamos
no depende tanto de nosotros
como de la imperceptible rotación

VII

Desfile de abigarradas figuras oníricas
que pretenden tocarme y dejarse tocar
vislumbre de ayeres indecibles y futuros latentes
urdimbre de lazos almáticos
que se deterioran por inexorable cronos
fino vórtice de esperanza contraesperanza,
fe y escepticismo a un tiempo

voces agazapadas en alma muerta,
espíritu vago y cuerpo trémulo…
río seco que dejo de llamarse río
para convertirse en vestigio
rocas reticentes por antiguo estatus,
condición, forma y sustancia

sueños que son sólo eso,
etéreas e inasibles figuras consteladas
jamás tocadas, siempre anheladas,
insondables, inspiradoras, entusiastas…

Perogrullada con sabor a ajenjo,
faro guía que mata a insecto
estoy despierto y me siento muerto
estoy en sueño y me siento despierto
sueño despierto
y despierto sueño

Camino un poco y me siento estacionado
vago humor que viene a todo ofuscarlo
Cuando por casualidad me dejo encontrar por la calma
siento que avanzo en la fina trayectoria de ave soñadoratortuga obstinada,
hormiga útil, lluvia precisa

VI


Extraviados ojos reticentes,
vago humor ofuscado
deambulaje del alma saturnina
añoranza voluptuosa, afilada, aguda
por desprecio sórdido, atroz, descorazonador
Ojos velados a la cruel intemperie
congelados en momento crucial
de sueño roto
palabras desangeladas
destino umbroso que se cierne al punto

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Ni liebre lisonjera y floja
que al medio camino los bríos afloja
ni tortuga regordeta, paciente y de más obstinada
tan sólo corazón bohemio
solitario, replegado y mimetizado en las masas
ente libre, lectura interior abierta
constante, cambiante, vibrante
como el espíritu libre
corriente, que no se estaciona en la gente
cosas...
en turno del mundo vertiente.

V


De un tiempo para acá
a cuanta fotografía de rostro vea
percíbole unas contenidas ganas de llorar
un sesgo de mirada caída
sonrisa rota
deseo fragmentado

De un tiempo para acá
los rostros me parecen
próximos muertos
precoces y marmóreos
en quienes subyacen
tragedia y comedia a un tiempo

La vida, o lo que así se le llama

Eterno laberinto intrincado
voraz abismo que no se sacia
vida
archienemiga de la vida

Vida que no se deja ser vivida
Vida que se escapa como el río
Le ves diáfano y suelto
flujo y reflujo de un eterno devenir

Nunca para, nunca atina
Siempre se esconde
me esconde
me mata…
la vida
se cobra
me cobra.

IV



Nihil
Pies en el suelo
Cuerpo sediento y no miento
Alma difusa como mi presente
Me asomo al futuro, me asusta y regreso
Me engaño, a quien miento,
No puedo, desuso, atravieso, penetro y regreso
No entiendo
Me acuerdo, me llama, le llamo, se llama, no nombro
Me tienta, le olvido, me espera, no busco, no quiero, no amo
¿Quien me ama y no amo?
¿Quién llama y no escucho?
¿a quien demonios le importo en verdad?
Y si así es, me importa muy poco eso…
Y todo…
Y nada.
2004

III


Siento como la esperanza se entrecorta
Se parte estrepitosamente ante el peso de la nada
como se me cuela la nostalgia entre la ropa...
¿Acaso nací para ser humo, destiempo y reminiscencia
tan sólo?
tan solo…

Cronos engaña y burla los sentidos
que se piensan siempre a futuro;
Desgastado el hoy,
sábenos el mañana tan desabrido,
tan fútil ya.

Los bríos de hoy, envasados en la experiencia…
nada son.
Para nada sirven,
Nada pueden remediar.

Nos faltó valor para defender el secreto ideal,
izar la más personal bandera
amar con la entrega de los locos,
luchar por conservar el amor más puro,
la entrega más honesta
el deseo más cierto

De sobra iracundos, pendencieros
con la mano que nos da alimento
nos sublevamos contra nuestra propia quimera
gigantes inexistentes, y bondades ultrajadas
quisimos bajar así a Dios de las estrellas
las estrellas del cielo
abaratamiento de lo celeste
misticismo de consumo
orientalización de occidente
para vernos refinados, importantes
sofisticados y profundos

Pensando engañar a Dios,
nos ufanamos de su desconocimiento de efecto
total que él es la primera causa –aducimos…
¡Entonces nos jactamos de la tardanza del juicio
bañados en nuestro propio vómito!
Sin darnos cuenta que el olvido y la orfandad
Es en sí el peor de los suplicios
lamimos nuestras heridas, y le rendimos culto
a la muerte, al dolor y a la no-vida
cultura necrófila a marro y cincel concebimos

Orfandad buscada obstinadamente

Nos percatamos de ella
Hasta que llorando en la noche
Llena de estrellas
Nos sentimos lejos de lo otro y nosotros mismos
solos,
solos
Con nuestra soledad desolada.

II


Se me antoja la vida un clamor incesante,
estertor que despierta al que cabecea en su estúpido optimismo
Se me antoja la alegría fatalidad que se aproxima
La flor marchita, preconización de mi espacio interno y externo
Cierro los ojos y siento la brizna susurrar el sollozo de la tierra y agua


Imprimo en silencio las gélidas caras de la acera, en vano sonrío a lo inerte…
Así que me reconvino a mirar el infinito éter …
tan amplio que hace olvidar lo efímero de la vida,
lo sutil que aparece el dolor frente a lo eterno, frente al eterno
Las nubes allá arriba, siempre pasando, más allá del mar de polvo y concreto
que me enferman con su escala de grises, más allá de la rutina que me sepulta
y enajena sin pedir permiso, dar explicación, o permitir regateos…

I


Llega un momento

Llega un momento en que la corriente que nunca te hizo ceder
de pronto te arrastra con ímpetu junto a los bejucos, troncos y basura del cause
…normal
llega un momento en que los chismes, críticas y burlas por fin te hacen efecto
veneno corto que acumulado, hace daño.
Llega un momento en que ese dolor almacenado por fin estalla
y no hay nada que te consuele,
que te levante, que te devuelva la fe,
la razón, las ganas de vivir...
llega un momento
en que los amigos se van, se dispersan,
se pierden, no existen, se extinguen.

llega un momento
en que el dinero no llena,
los besos no sacian y los abrazos no bastan.
l
lega un momento en que la vida te decepciona más de la cuenta
así que decides no rebatirla más, no contrariarla más...
así que, dócilmente te haces cómplice de su devenir, desvivir, y te abandonas,
te nublas y te acabas y empiezas a morir.
llega un tiempo y el tiempo ya es.